No soy muy de cines, la verdad. El precio de la entrada sumado a las palomitas me pesa demasiado, y el tiempo que tengo que esperar para poder tener acceso a la película en Blu-ray no me supone demasiado si tengo en cuenta que la veré en una tele de 55 pulgadas, con un sistema 5.1 mientras estoy despatarrado en el sofá de casa. Pero todo eso ha cambiado. Ahora quiero ir al cine. ¿Por qué? Porque Dolby ha creado los Dolby Cinema, una espectacular sala en la que sencillamente disfrutaremos de una excelente calidad de imagen y un audio espectacular. ¿Tanta diferencia existe con los cines convencionales? Así es. Y te lo voy a contar a continuación.
Dolby Cinema es el resultado de unir dos tecnologías propietarias de la marca, Dolby Vision y Dolby Atmos. Esta última, enfocada al sonido, está presente en muchas salas del mundo (incluyendo España), y se encarga de ofrecer una experiencia multidimensional en la que seremos capaces de reconocer ubicaciones de objetos gracias al sonido. Para ello cuenta con una distribución de altavoces que incluye unidades en el techo, de forma que el sonido pueda llegar también desde arriba de nuestra cabeza. El resultado es un efecto de movimiento muy sorprendente que logra introducirnos en el centro de la escena, llevando a otro nivel lo que antes conocíamos como sonido envolvente.
De todas formas Dolby Atmos no es exclusivo de las salas Dolby Cinema. Actualmente podemos encontrar amplificadores en el mercado que ofrecen esta tecnología, y sólo tendríamos que colocar altavoces en el techo o utilizar unos frontales con proyecciones superiores para poder disfrutar de la experiencia Atmos.
Pero Dolby Vision es harina de otro costal. Esta tecnología es completamente nueva, y para disfrutar de ella tendremos que desplazarnos a una de las 7 salas en el mundo que disponen de esta tecnología. La idea de Dolby es seguir expandiendo Vision por todo el mundo, pero para eso tendremos que esperar. En Europa existen dos salas Dolby Cinema, ambas en Holanda, una en Eindhoven y otra en Hilversum, pero casualmente la compañía está trabajando codo con codo con las salas de Cinesa La Maquinista en Barcelona para llevar sus proyectores láser a finales de este mismo año y convertir una de las salas en Dolby Cinema.
Pero hablemos de la proyección. Dolby Vision se encarga de llevar una imagen espectacular a la pantalla de la sala gracias a dos proyectores láser (para disfrutar de contenidos en 3D) con resolución 4K que ofrecen un total de 31 pies-Lambert (el doble de brillo de una sala tradicional). Pero además de brillar con fuerza, el nivel de contraste ofrecido es algo realmente espectacular. La prueba que pudimos presenciar nos mostraba un círculo blanco en el centro de un fondo negro. Con un proyector tradicional, el negro proyectado en la sala sería en realidad gris, iluminando parte de la sala y produciendo sombra en objetos y personas que se se sitúen frente a la pantalla.
Con Dolby Cinema sin embargo, los negros son los negros más oscuros que hemos visto nunca, dando como resultado una sala completamente oscura iluminada por un resplandeciente círculo blanco que resplandecía como si de un sol se tratase. Es sin lugar a dudas lo más espectacular que hemos visto en mucho tiempo. La sensación de oscuridad total es tal, que la proyección no produce sombras (en la zona negra) si alguien se coloca delante. Además, la sala se mantiene en oscuridad total, lo que impresiona todavía más. El contraste ofrecido es realmente impactante (1.000:000:1), y si a ello le sumamos imagen en HDR, el resultado es una proyección extremadamente llamativa que resalta colores y brillos como nunca antes habíamos visto. Precisamente los colores es otro punto en el que Dolby Vision también destaca, ya que la paleta que maneja es mayor que la que normalmente disfrutamos en los cines actuales.
Pero además de los proyectores láser, la sala es un elemento importante a la hora de poder obtener la mejor experiencia. Las paredes están pintadas de color negro mate para evitar reflejos, y cuenta con una estructura poligonal que se encarga de orientar el sonido a las butacas y evitar eco. Además, los sillones son muy cómodos y amplios, y la separación entre filas es algo mayor que la habitual.
La película que pudimos ver en esta sala no fue otra que Inside Out. Aunque no era la más adecuada para disfrutar de Dolby Atmos, sí lo fue para aprovechar al máximo las peculiaridades de Dolby Vision. Pixar ha aprovechado al máximo la paleta de colores que ofrece la tecnología de Dolby, y gracias al contraste y efectos de luz la película lució realmente bien, por no hablar de la resolución, que llenó la inmensa pantalla con una definición increíble. Como ya decíamos, escenas con diferentes exposiciones lucieron extremadamente bien gracias al rango dinámico ofrecido por los proyectores, algo que nos recordó bastante a unos prototipos de televisión OLED de Panasonic que contaban con tecnología HDR. Esa sería quizás la solución más cercana a Dolby Vision que podríamos tener para el hogar, aunque como nos confirmó la propia compañía, ellos ya están trabajando en llevar Dolby Vision a los hogares a través de acuerdos con fabricantes, como es el caso de Vizio, con el que ya enseñó un primer prototipo en el pasado CES.
El CEO de los cines JT Bioscopen (compañía propietaria de las dos únicas salas Dolby Cinema de Europa) nos comentó que la acogida del público ha sido realmente buena, y que actualmente las salas Dolby Cinema se llevan el 75% de la recaudación frente a la sala con la misma película y proyección tradicional. El precio de la entrada es ligeramente superior al de la sala tradicional, pero parece que el público ha sabido apreciar las ventajas de la tecnología. ¿Pero cuando podremos disfrutar de Dolby Cinema en otros países? Lamentablemente la expansión de las salas se producirá de manera lenta y pausada. Es quizás uno de los inconvenientes que más nos pesa, ya que la tecnología en el lado doméstico sigue avanzando, y tarde o temprano tendremos en las tiendas soluciones con las que obtener resultados similares a los de las salas (recordemos que Atmos ya está disponible en las tiendas).
Mientras tanto, en Barcelona, Cinesa trabaja con Dolby para llevar Dolby Vision a una de sus salas, para así completar el combo y recibir la certificación Dolby Cinema a finales de año. Por otro lado, Cineplexx también ha llegado a un acuerdo con Dolby, y colocará en Austria un total de seis salas Dolby Cinema entre 2016 y 2017. Será un proceso lento, pero que sin duda merecerá la pena esperar. La experiencia global es muy cómoda, ya que al contrario de lo que ocurre con los efectos 3D (donde necesitamos además unas incómodas gafas), en Dolby Cinema no encontramos ningún tipo de distracción, algo que nos permite sumergirnos completamente en la reproducción y disfrutar de los dos elementos básicos en el cine: imagen y sonido. Esperemos que la expansión en España no tarde demasiado, porque no veo el momento de volver ir al cine.
Fonte Engadget